Pink Pink lucha con extraños cambios de humor, incluido el chocolate con menta

Cada día se siente como una pequeña lucha, solo tratando de decidir qué ver mientras como.

Abro YouTube, busco contenido sin parar esperando que algo haga clic por arte de magia, pero no.

¿Debería hacer un vlog, un tutorial de maquillaje o mini historias de terror? No sé.

Quizás un video de cocina, luego pienso en empezar una serie o una película, pero incluso eso se siente como una tarea cuando no tengo ganas.

Es un limbo extraño: querer entretenerme pero no saber qué me hará sentir mejor.

A veces simplemente me siento, cambiando de pestaña, pasando de YouTube a TikTok y de vuelta a los Reels de INSTAGRAM. ¡Son entretenidos! Sí, me gustan los Reels, son geniales.

Honestamente, es un tipo de agotamiento mental tan extraño del que nadie habla.

Y por si fuera poco, está el estrés constante de fondo: buscar trabajo, actualizar currículums, preparar entrevistas.

Créeme, es duro. Haciendo malabarismos mentales con qué ver y qué hacer con tu vida... Sí, es una batalla diaria.

Solo quiero ser niñera. No me importa. Hay días en que incluso navegar me parece demasiado trabajo.

Solo quiero encontrar algo reconfortante, algo que se sienta como un descanso suave, salir a caminar, solo naturaleza, sin humanos, solo yo y la lluvia.

Pero en cambio, es un bucle sin fin de "no, esto tampoco".

Todo empezó cuando una amiga de mi hermana la sorprendió con la cajita más bonita que jamás había visto, jajaja.

Solo el empaque parecía sacado de un mundo de hadas. ¡¡¡ERA UNA HADA!!!

(CON VOZ INOCENTE) Era una cajita rosa melocotón suave con un atrevido diseño de alas de mariposa (¡DIOS MÍO, ME ENCANTAN LAS MARIPOSAS, LALLALALA!) claramente marcada como Tinterbell Lip & Cheek Tint.

No es tinte de Campanilla, jajaja. ¡Vaya! ¡Encuentra a Peter! :D

Justo abajo, decía VIDA New York, quizá sea una marca que no conozco, lo que le da ese toque internacional y sofisticado.

Me brillaron los ojos al ver "PEONY" impreso en la parte superior. ¿Qué es una peonía? No sé, quizá sea un nombre de tono que sonara delicado y atrevido a la vez.

Como la entusiasta de la belleza que soy, no me pude resistir.

Mi hermana, con su dulce alma, me dejó probarlo primero. En cuanto abrí la tapa y di una pasada, me quedé sin aliento: este tinte no era ninguna broma.

¡El resultado del color! ¡Una locura!

Una sola gota le dio a mis mejillas un rubor radiante, como si hubiera corrido 5 km o hubiera escuchado a mi crush decir "hola".

Era el tipo de rojo que te hacía verte viva.

Pero cometí un pequeño error: subestimé su poder.

En lugar de un pequeño punto, apliqué tres toques completos en cada mejilla.

Lo que siguió fue un brillo inesperado que se convirtió en un momento de locura.

Mis mejillas pasaron de un rubor rosado a un tono de tomate quemado por el sol en segundos.

Me reí de mí misma en el espejo y, sinceramente, fue una vibra.

Un toque muy extra payaso.

Aun así, me encantó el producto.

La textura era sedosa, se difuminaba bien (una vez que dejé de entrar en pánico) y dejaba ese rubor radiante que solo se ve en los dramas coreanos.

No dejaba de pensar: «¡Chica, esto es lo que yo llamo una inyección de dinero! ¡Lisa lo aprobaría!».

Anoche mi hermano entró con una sorpresa: una caja de barritas de chocolate con menta y crema de Paxy.

El envase estaba bien, como si pudiera ser mejor.

Un relajante fondo verde menta, salpicado de hojas de menta flotantes y una imagen tentadora de cuadrados de chocolate en capas: marrón intenso por fuera, menta cremosa por dentro. Como si el diseño de interfaz de usuario/experiencia (UI/UX) o el diseñador gráfico no hubieran hecho un mal trabajo. Puede ser mejor. Es bueno que no haya una foto de un actor o actriz con ese nombre, como Sharukh Khan, Wonyoung o Katrina's Chocolate (o "Sydney Sweeney Bite").

Volviendo al tema, sin perder un segundo, llamé a mi madre y a mi hermana.

Las tres nos sentamos juntas a abrir este tesoro de medianoche como niños en la mañana de Eid o Navidad.

En cuanto di el primer bocado, la menta cremosa irrumpió a través de la sedosa capa de chocolate y juro que era mejor que los chocolates de Dubái. ¡Es broma! ¡El chocolate estaba bien!

Pero había algo reconfortante en el sabor: el equilibrio de dulzor, la menta fresca, la riqueza de la crema entera... era como una manta acogedora en una noche ventosa, jajaja.

Mi madre, a quien no suele gustarle la menta en los postres, terminó pidiendo otro trozo. No sé cómo le sienta la combinación, ¡jajajaja!

Mi hermana, con sus siempre altos estándares de chocolate, también asintió, pero para ser sincera, me parece normal. Una vez probé el increíble chocolate Dubai, estaba tan bueno que pedí un trozo, pero era tan delicioso, apetitoso y tan reconfortante... ¡Ay, ahora que lo recuerdo, se me antoja! ¡Uf!

Comiendo el chocolate, nos reímos y hablamos de nuestros viejos viajes familiares donde mi hermana se cayó al agua, jajaja. Yo fui quien la empujó. Es curioso cómo un refrigerio nocturno puede unir a una familia.

Incluso guardamos algunos trozos para disfrutarlos al día siguiente con chai. Me encanta el chai, es té, por una vez, ¿quién no lo sabe?

Sinceramente, si tuviera que elegir entre una barra de chocolate importada de lujo y esta joyita de Paxy's, elegiría la de lujo :D

No era solo chocolate, era amor en capas. ¡Es broma, estaba buenísimo!

@steemchiller
@cotina