Los colores del cielo: un lienzo natural en constante cambio
El cielo es uno de los espectáculos más fascinantes de la naturaleza, un lienzo que cambia de colores a lo largo del día y que ha inspirado a poetas, científicos y soñadores desde tiempos antiguos.

El color azul característico del cielo durante el día se debe a un fenómeno llamado dispersión de Rayleigh. La luz del sol está compuesta por varios colores, y al atravesar la atmósfera, las partículas de aire dispersan más fácilmente las longitudes de onda cortas, como el azul, lo que hace que lo percibamos con ese tono.
Al amanecer y al atardecer, el cielo adquiere tonos rojizos, anaranjados y rosados. Esto ocurre porque el sol se encuentra más cerca del horizonte y su luz debe recorrer una mayor distancia en la atmósfera, lo que dispersa las ondas cortas y deja pasar los colores cálidos.
Durante la noche, el cielo se viste de negro y se ilumina con estrellas, planetas y la luna, ofreciendo un contraste que ha despertado curiosidad y misticismo en diferentes culturas. La oscuridad nocturna permite observar el universo y reflexionar sobre nuestra pequeñez en él.
Los fenómenos meteorológicos también pintan el cielo con matices únicos. En días nublados predominan los grises, mientras que después de la lluvia, los arcoíris llenan el firmamento con un despliegue de colores que surge de la refracción y dispersión de la luz en las gotas de agua.
En algunas ocasiones, fenómenos más extraños como las auroras boreales tiñen el cielo de verdes, rojos y violetas. Estas luces naturales se producen por la interacción de partículas solares con el campo magnético de la Tierra, creando un espectáculo único en regiones cercanas a los polos.
Los colores del cielo no solo tienen una explicación científica, también poseen un fuerte valor cultural y emocional. Muchas civilizaciones los han interpretado como señales divinas, y aún hoy evocan paz, nostalgia o inspiración en quienes los contemplan.
Observar el cielo es, en esencia, un recordatorio de la belleza que nos rodea y de la conexión entre la ciencia y la poesía en nuestra vida diaria.