Hola amigos, interesante tema el que nos trae @genomil. Quisiera invitar a la participación a:

@eudisdiaz
@aplausos

Como todos saben, soy Testigo de Jehová, y todas mis opiniones las baso en lo que dice la Biblia, ya que considero que al tomar una decisión debemos tomar en cuenta lo que opina Dios (Jehová) al respecto.

Cuando vamos al médico, estamos confiando en sus conocimientos, sin embargo, muchas veces y dependiendo del caso, es bueno buscar una segunda y hasta tercera opinión médica, actualmente por la crisis económica, se hace bastante difícil consultar con un médico, imagínate consultar con dos o tres, pero la situación lo amerita.

Mi opinión

Entiendo que es una situación muy dura y que no es fácil tomar decisiones así, pero creo que siempre vale la pena buscar varias opiniones médicas, aunque sea complicado. A veces un diagnóstico puede variar y es mejor estar completamente seguros antes de dar un paso tan importante.

La vida es un regalo, aunque venga con retos que tenemos que afrontar con valentía.

1. ¿Qué harías tú si estuvieras en su lugar?

Yo sé que es una decisión que parte el alma, pero la Biblia dice que la vida viene de Dios (Salmo 127:3) y que Él ya conoce a cada persona desde antes de nacer (Jeremías 1:5). Yo no me atrevería a interrumpir el embarazo, aunque sea duro, porque creo que cada vida, por difícil que sea, tiene un propósito.

Si Dios permite que el bebé nazca, entonces yo me comprometería a cuidarlo, protegerlo y enseñarle a vivir con optimismo, para que no crezca con complejos, sino que aprenda que su valor viene de Dios y no de su condición física.

2. ¿Crees que vale la pena continuar con un embarazo cuando el bebé tiene malformaciones graves?

Sí, porque la Biblia nos enseña que toda vida tiene valor, sin importar su apariencia o sus limitaciones (Salmo 139:13-16).

Además, hay muchos casos de personas que nacieron con discapacidades y hoy son ejemplo de superación y alegría.

Claro que no es fácil, de verdad es un reto, pero con amor y dedicación, los padres pueden darle al niño una vida llena de sentido, enseñándole a ser fuerte y a ver el lado bonito de la vida, en vez de sentirse menos que los demás.

3. ¿Has vivido o conocido un caso parecido?

Sí, he visto familias que han pasado por esto. Algunas se desesperan, pero otras toman la decisión de seguir adelante y criar a su hijo con todo el amor del mundo.

Y aunque es un reto, esos niños terminan siendo una bendición, porque enseñan a valorar la vida, la paciencia y la fe. Lo más importante es que los padres los ayuden a crecer felices y seguros de sí mismos, para que no vean su condición como un límite sino como parte de lo que los hace únicos.

Un mensaje final

Al final, cada vida es un regalo, incluso cuando llega con retos que no esperábamos. A veces los diagnósticos médicos pueden ser ciertos, otras veces sorprenden y no se cumplen. Por eso, antes de tomar cualquier decisión, vale la pena buscar toda la información posible, pedir consejo y, sobre todo, pedirle a Dios claridad y fuerzas.
Si ese bebé viene con dificultades, no significa que su vida o la de sus padres vaya a ser triste. Con amor, dedicación y fe, muchos niños con problemas de nacimiento logran sonreír, disfrutar y enseñar a su familia lo que de verdad importa: valorar la vida y vivir con optimismo.