Ja ja ja, ni siquiera unos marcianos invasores se escapan del grito de una doña a la que le ensucian un piso que acaba de limpiar... Muy bueno, muy bueno.
Cuando ya no tenemos a un ser querido con nosotros, aquellos detalles que parecían no tener relevancia sin los que se vuelven más apreciados y significativos... Un papel, un lápiz, una prenda de vestir o cualquier cosa sencilla, hasta una simple cinta de color verde. Buen micro amigo 👍👍
Aterrador... Cuando todo está perdido que otras opciones quedan... ¿Postergar la agonía o resignarse y entregarse a lo que ya está seguro?
Muchas gracias por sus sabios comentarios, amigo. Eso demuestra siempre que aborda con esmerada atención lo que se ha escrito. Un gran saludo.