Acerca de la boa del Principito, en realidad no se comió un elefante, porque los elefantes son muy grandes y no caben en la boca flexible de las boas. Además, los elefantes se la pasan en las telarañas balanceándose y a esas serpientes les da grima las arañas, sobre todo las peludas. En este caso lo que se comió la boa fue un borrachito que se encontró sobre la acera, a pocos metros de un bar de mala muerte. A ese señor se le desgastó la batería porque se volvió loco y bebió ron, cerveza, caña blanca y tequila.

Pero no hay problema de que ese señor se vaya a morir digerido por la culebra, debido a que, a causa del exceso de alcohol en el organismo del tipo, la culebra estará a punto de vomitarlo y dejarlo tranquilo en el mismo lugar donde se lo encontró. De modo que el exceso en el beber no es recomendable para la salud ni de las personas ni de los animales, porque por eso hay quienes dicen que borracho no es gente, y por ese motivo la culebra lo confundió tal vez con un mono y he ahí el triste resultado.

_{Dispositivo utilizado: Infinix Hot 11
Invitación: @joslud, @oneray, @marianri, @betsay}