Concurso acelerador Steem4nigeria Semana 109: Dejar ir
⏳¿Qué entiendes por el tema "Dejar Ir"?
Cuando todo se acaba / F
Realizamos algún plan o proyecto para un futuro inmediato o lejano que va afianzándose en nuestra mente y lo visualizamos como una meta perfectamente posible. Nos dedicamos, durante un período considerable, a determinar la manera en que avanzaremos hacia ese objetivo: cómo conseguiremos los recursos o el modo de implementar las herramientas de las que dispongamos, de qué manera vamos a comenzar y a desarrollarlo una vez que se ha iniciado, cuánto tiempo tardaremos en el proceso y hasta cómo asumiremos la especial satisfacción en el momento en que vemos ese anhelo materializado.
Sin embargo, una serie de obstáculos e imprevisiones se atraviesan en el camino y ese propósito hacia el que marchábamos con todo el empeño posible se va postergando; pensamos quizás con mucha fe, al principio, que si no lo logramos durante el lapso en que lo habíamos previsto con seguridad lo haremos después; pero esas circunstancias adversas que lo retrasan se repiten de manera frecuente hasta que llega un instante en que simplemente lo dejamos ir.
⏳¿Has tenido alguna experiencia en la que tuviste que dejar ir algo?
Resignación / F
Pasé más de veintisiete años, como docente, en las aulas universitarias. Me encantaba mi trabajo y recuerdo que cuando comencé en esas labores pensé seriamente que estaría ejerciendo hasta que mis fuerzas lo permitieran, hasta que tuviese la lucidez necesaria para impartirles la enseñanza del idioma a los futuros profesionales de nuestro país. Sin embargo, hace dos años, en plena facultad de mis capacidades físicas y mentales, solicité formalmente la jubilación del sistema de educación superior, tuve que ponerle fin a mi carrera de profesor universitario.
Algunos factores coincidieron en el tiempo para que tomara semejante decisión. Los principales fueron el abandono, el descuido, al que fue sometida la educación por parte de la administración pública encargada de estos asuntos y la deficiente preparación e indisciplina de los bachilleres que ingresaban estos últimos años a la universidad. A pesar de mi disposición y optimismo por los efectos transformadores del proceso enseñanza-aprendizaje, debí convencerme, ante las dificultades, que debía dejarlo ir.
⏳¿Por qué y cómo sabes que es hora de dejarlo ir?
Todo está en contra / F
Cuando todos los caminos se cierran, cuando todos los esfuerzos que realizamos son inevitablemente obstaculizados por situaciones cuyas soluciones se tornan demasiado difíciles, además de que no dependen de nosotros; cuando constatamos que por cada paso que damos hacia adelante cualquier traba nos devuelve tres pasos hacia atrás, cuando la consecución de nuestros propósitos se alarga mucho más de lo que habíamos previsto, debemos pensar con seriedad en la hora de dejarlo ir.
En mi caso, la precariedad en que se sumieron las condiciones del ambiente universitario, que distaban mucho de ser las ideales para llevar a cabo el importantísimo proceso de educar, la carencia de los recursos y herramientas básicas para la enseñanza y, por otra parte, el irrespeto de los estudiantes a la majestad universitaria y la falta de interés por aprender o nivelar sus conocimientos me condujeron a dejar a un lado mi amada profesión.
Invito a los amigos:
@sadaf02,
@mainuna y
@syedabatol
Tu historia resuena profundamente. Es desgarrador ver cómo la pasión y la dedicación se unen a la frustración. Tu experiencia pone de relieve los desafíos que enfrentan los educadores, desde la falta de apoyo hasta el desapego de los estudiantes. Es admirable cómo perseguiste tu pasión por la docencia durante tanto tiempo a pesar de los obstáculos. A veces, dejar ir puede ser la decisión más empoderadora. Esto nos permite redirigir nuestra energía hacia nuevas oportunidades. Te deseo éxito y bendiciones 🤗.