Excelente publicación amigo, con lo que demuestra porque al consumidor le conviene más comprar el pollo fresco antes que el congelado, por la merma por el agua que ponen dentro del pollo los comerciantes y empresarios inescrupulosos para que tenga más peso, en mi casa mi esposa ha sacado bolsita de agua que pesa entre 100 y 200gr y lo que parece ahorro se convierte en pérdidas, además del agua las partes que ellos no retiran para que sean los consumidores los que lo hagan.

Por otra parte, la carne pierde la frescura porque cuando lo trasladan largas distancias muchas veces no se garantiza que cumplan con la cadena de frío y el pollo sufrw varios procesos de descongelado y congelado lo que hace que ya no sea fresca la carne.

En conclusión por motivos económicos y de frescura de la carne resulta mejor la compra de pollos criados por minoristas que a las grandes empresas, yo en lo personal apoyo el emprendimiento y cuando puedo adquirir pollos fresco lo hago.

Saludos.