Saber escuchar rinde muchos beneficios, así cómo la terquedad puede ser perjudicial. Leonor, sin necesidad de asistir a clases especializadas, tuvo la sabia decisión de escuchar y aprender, pero sobre todo, de llevar a cabo lo aprendido. Sólo debe tener cuidado al dejarse llevar por el amor.
Gracias por unirse al concurso, amiga.
Ciertamente. Su debilidad en torno al amor, corrobora la idea de que "Nada ni nadie es perfecto. Todo el mundo tiene una debilidad", jeje. De manera que Leonor no es un caso excepcional, jeje.
Mil gracias por tu lectura y comentario. Un abrazo.