Fue inevitable ella logro conseguirlo ¡Me enamoró! Solo basto una mirada, no voy a olvidar aquel encuentro, el amor duele y debo reconocer que eso paso justo cuando la conocí. No titubee al luchar por ella, valió la pena cada esfuerzo que realice.

Al fin llegó, llegó para alegrarme y cambiar mi mundo, me atrapó con su carita Dios la hizo perfecta tal cual mi alma la describía, como si de un cuento se tratase ella llegó para cautivarme.

Un día antes de mi cumpleaños volví a saber que era el amor, mi mundo sufrió una sacudida de esas que te hacen entender que tienes muchas razones para vivir, hay motivos por el que debes luchar y ella fue el motivo más bonito que me regaló Dios.

Desde el primer instante que la vi todo lo que deseaba lo podía ver allí justo enfrente de mi, llena de ternura y tanta inocencia sentí querer meterla en una cajita de cristal para protegerla, sentí que mi vida era completamente de ella.

Jamás imaginé amar tanto en esta tierra. Pero viendo sus ojitos comprobé que si, si se puede amar ese olorcito que emana de su tiernita piel y cada que llora es una etapa que se vive bonito.

Romantice la maternidad justo en aquellas noches de desvelo, la romantice al sentir los latidos de su corazón en mi pecho, la romantice en aquellas días de dudas cuando sentía que no lo estaba haciendo bien.

El amor existe y lo comprobé en la maternidad.