The Diary Game || 29/09/2025 || La historia de hoy.
Hola...👋
So let's start.🍀
La rutina de hoy. (29/09/2025).
La vida no es fácil para nadie. Creemos que si hay tristeza en nuestra vida, no la hay en los demás. Vivimos felices.Cuando hablas con alguien, te das cuenta de lo difícil que es la vida, no solo para nosotros, sino para todos. Pero lo importante es que debes tener ese potencial. Debes tener la valentía de vivir mejor. Hoy, mientras caminaba, me encontré con una amiga. Aunque vivimos juntas, nuestras casas están cerca, pero no solemos hablar. Hoy, al hablar con ella, me enteré de que mucha gente está enferma en casa. A las siete en punto, mucha gente también está enferma en la otra casa. Debido al dengue, todos han enfermado y me dijeron que no volviéramos a nuestra casa. Cuando estuve a su lado, me enteré de que su esposo está tan enfermo que ni siquiera va a su casa. Las condiciones en su casa son muy malas. Estoy muy preocupada. Pensé que estaba más preocupada por las facturas, pero me duele mucho escuchar las preocupaciones de todos.
Mientras hablaba con ella, vi una flor que jugaba cerca de mí. Era preciosa, como una flor que no se podía tocar, pero no había ninguna restricción para fotografiarla. Le tomé una foto y me fui a casa. Ella también estaba bastante preocupada. Luego preparé el desayuno y desperté a los niños. Los niños desayunaron. Después, fui a su casa. Le sorprendió que normalmente fuéramos amigos, pero aun así, debido a nuestras apretadas agendas, nunca podíamos invitarnos. Al llegar a casa, les dije a los niños: "Bueno, hoy ha sido un día muy extraño. Después de tanto tiempo, vi que mi hija había lavado los platos y la ropa. Debí de estar esperando allí un buen rato. Después, preparó el almuerzo y comimos en mi casa".Mi hija trajo ropa para coser. Siempre le gusta mi ropa hecha a mano porque soy muy buena cosiendo. He estado haciendo todo esto desde la infancia porque soy de la época en que se decía que las niñas debían cuidar de la casa, coser, bordar, todo, así que envié a mi madre a enseñarles a todos y mi hija nos dejó usar ropa. Ni siquiera dice que debe traerla de la tienda y usar esa ropa cosida. Incluso si la trae, no disfruta usándola. Trajo la tela y me la mostró. Dije bien, te la haré, pero necesitaba ponerle un poco de encaje y perlas. Así que tomamos la tela y fuimos a la tienda cercana a comprar las perlas junto con la tela.
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Los niños tienen una gran costumbre porque les gusta mucho la ropa llamativa. O si llevan ropa sencilla, le aplican algo que les da un toque muy bonito. Bueno, cuando llegamos a esta tienda, tenían muchísima variedad. La otra tienda donde solíamos comprar estaba cerrada, pero hoy, para nuestra sorpresa, también tenían mucha.
Recogió las cosas según sus gustos y necesidades. Tomó una perla, un botón y un envoltorio. Después de tomarlos, hizo una factura y yo la pagué. Después, salimos. Recordé que en casa se habían acabado el azúcar, los chiles rojos y la sal, y estas cosas se acaban todos los días. Así que le dije: «Sí, vamos a comprarlas en la tienda más cercana». Nos detuvimos en la tienda y nos fuimos. Después de un rato, regresó, tomamos lo que necesitábamos y nos fuimos a casa.Bueno, como habíamos caminado a casa, hacía mucho calor. En cuanto llegué, me duché. Mi hija también se duchó. Después, nos sentamos a comer. Mi otra hija preparó una taza de té. Luego trajeron el pastel de la casa de al lado porque era una fiesta de cumpleaños en su casa, así que era bastante grande. Lo habían enviado entero, así que me comí un trozo.
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Como tenía el estómago lleno, había comido pastel, así que me sentía bastante satisfecho. Estaba atardeciendo, así que salí un rato a la terraza. El sol se ponía y el tiempo pintaba precioso. Soplaba una suave brisa, así que me quedé allí sentado un rato. Cientos de cosas me rondaban la cabeza. Siempre que uno cree que se sienta a descansar un rato, miles de cosas le pasan. Algo parecido me pasaba a mí también. Están pasando tantas cosas en la vida que he hablado de ello. No puedo seguir siendo un sirviente.Luego bajé y me senté. Mi hija me dio fruta. La corté y empecé a comerla.
Mientras disfrutaba del clima, no me di cuenta de la hora. De repente, miré el reloj y estaba sonando. Esto significaba que la luz se iría sobre las 9:30, y después, también la gasolina.Para ser sincero, no entiendo por qué este gobierno no puede permitirse nada. No puede permitirse la electricidad ni el gas. La gente común está muy preocupada en este momento, y yo también soy una de esas personas. Vi un paquete de pollo en el refrigerador y dije: "Hagamos esto". Inmediatamente les preparé comida, incluyendo ajo y cebolla.Después de comer, le dije a mi hija que me diera el teléfono. Quiero acostarme un rato y ver vídeos en YouTube. La llamé. Se fue a su habitación a dormir.
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