SLC26-W1 | Tequeños
Imagen propia / F
I. Elaborando mis propios tequeños
Ante todo, debo declarar que no soy cocinero y que cuando me he atrevido a preparar alguna comida, por lo general, no sale muy bien. Sin embargo, como me encantan los tequeños, además de que he visto varias veces a mi esposa elaborándolos, me animé a incursionar en este reto. Ella por cierto me dijo, como la inquebrantable docente que es: "Te puedo dar algunas recomendaciones, pero no voy a meter mis manos en eso; es una actividad que debes hacerla tú". Debido a que ya suponía que esas palabras vendrían, no me amilané y seguí adelante.
Acaté casi al pie de la letra las indicaciones proporcionadas por la amiga @nahela en la publicación del concurso. Mi esposa que de todas maneras se encontraba atenta a lo que yo hacía sugirió que se le podía agregar huevos y una pequeña porción de polvo de hornear, aun cuando la harina fuese leudante; pero me negué, no quiero arriesgarme, le respondí; procederé de acuerdo con lo que me dicen allí.
Ingredientes:
- 2 tazas de harina leudante
- 1 cucharada de margarina
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharadita de sal
- ½ taza de agua fría
- Queso semiduro (me gusta que se derrita y se desborde fuera del tequeño mientras se fríe)
- Aceite para la cocción.
Preparación:
En primer lugar, vertí la harina en un envase e hice el volcancito (me aseguré de que se viera en fondo azul de la pequeña ponchera, imitando la imagen de la publicación. Mi esposa sonrió divertida y yo supe que estaba pensando que eso no hacía falta). Antes de eso tuve que pasar la harina por un colador porque tenía minúsculas peloticas que me parecieron sospechosas.
Agregué luego la margarina, el azúcar y la sal. El agua fría, por recomendaciones de mi maestra presencial, se la fui agregando poco a poco, mientras mezclaba en un primer momento con una cucharilla.
Mezcla de ingredientes y amasado
A continuación comencé a amasar con los dedos lentamente. Al principio pensé que la masa quedaría muy dura porque no lograba compactarla, pero después se fue “tequenando” muy bien, como decían en mi pueblo, y quedó lista para llevarla a reposar en el refrigerador.
Como estaba emocionado porque todo iba saliendo de maravillas, me dispuse a cortar, de una vez, los bastones de queso para dejarlos también listos.
A las tres horas regresé para armar los tequeños. Me costó estirar la masa porque no había colocado harina espolvoreada por la superficie plana ni en el rodillo. Mi esposa se dio cuenta e hizo las correcciones y me instruyó, además, para que no la fuese a dejar demasiado gruesa.
Corté las tiras, eso fue muy fácil, pero el enrollado del queso, de manera que quedara cubierto por completo y con buena apariencia, me costó un poco; al cuarto intento lo logré.
Por último, llevé los tequeños al sartén para freírlos. A algunos se les desbordó el queso, aunque me gusta comerlos así, pensé que no era muy buena señal para este reto porque era un indicio de que no habían sido correctamente enrollados, pero era inevitable. De todas maneras cuando los probé, me pareció excelente su sabor y lo celebré.
II. Al probar los tequeños ¿Cómo fue tu experiencia? ¿Te gustaron? Detalla tu respuesta.
Claro que me gustaron. Sabían diferentes, en verdad, a todos los que había comido antes. La textura de la masa era una combinación entre suave y crujiente, casi se deshacían en la boca; el toque ligeramente dulzón acentuó su sabor y se conjugó de manera excelente con el queso derretido. Esperé luego que se enfriaran por completo para constatar si continuaban igual de sabrosos y, en efecto, así fue; no perdieron sus cualidades iniciales.
III. ¿Con que salsa acompañarías tus tequeños?
No me gusta, en realidad, agregarles ninguna salsa a los tequeños, me parece que les escamoteo su extraordinario sabor. Mis hijos, hace algún tiempo, los comían con salsa rosada, pero después se olvidaron de eso y los disfrutan sin ningún complemento adicional. Unos sobrinos, por su parte, cuando tienen a su disposición salsa tártara, embadurnan los tequeños con ella, sin embargo, no es algo que realizan con regularidad.
IV. Además del relleno que utilizaste para tus tequeños, ¿Qué otro relleno te gustaría utilizar o has probado? Cuéntanos.
En Puerto Ordaz probé en una ocasión los tequeños rellenos con mermelada de guayaba y, aunque no me parecieron del todo desagradables, pensé que jamás me comería unos cuantos elaborados con ese sabor. Algo semejante me sucedió con unos que estaban preparados con bastoncitos de jamón ahumado y otros con salchichas, me gustaron bastante, pero no para sustituir los tradicionales de queso blanco. Ahora que lo pienso, un tequeño equipado con una buena tira de salchichón debe ser sabroso. Habrá que probarlo.
Invito a los amigos:
@ripon0630,
@paholags y
@abdul-rakib
Nota: Todas las imágenes que pertenecen al autor fueron tomadas con la cámara del teléfono móvil, modelo: Samsung SM-A135M.
Saludos
Sin duda la Plataforma de Steemit nos hace incursionar en nuevos ámbitos,
Su primera vez para este Desafío fue un éxito, aprendió hacer el más famoso de nuestros pasapalos.
Muy apropiada la recomendación de su esposa para extender la masa.
Buen paso a paso, éxito en el desafío,
Me imagino seguirá con las manos en la masa 🤭!!
Esta era una buena oportunidad para incursionar en los ámbitos culinarios, ya que se trata de una receta sin muchas complicaciones; solo necesitamos, más que todo, ganas de elaborarla. Gracias por sus amables palabras, amiga. Un gran saludo.
¡Holaaa señor Amilcar!🤗
¿Qué maravilloso es salir de nuestra zona de confort cierto? Al inicio, ese miedito busca en frenarnos, pero allí es donde nos plantamos con tenacidad para impedirle que nos detenga.
A mí también me gusta que el queso salga del tequeños... Es una sensación de textura y sabor que no dejo de lado jajajaja.
Además del tequeños con guayaba, acá también lo he visto con Nutella... Ninguno de los dos los he probado, pero quienes sí lo han hecho, aseguran que es súper delicioso jajajaja.
Le deseo mucho éxito en la dinámica... Un fuerte abrazo💚
Es bueno salir de la zona de confort, por supuesto; además de que variamos en contenido, tenemos otras opciones para continuar publicando en esta plataforma. Gracias por sus elocuentes comentarios, amiga. Un gran saludo.
Excelente profesor, no está mal probar otras habilidades en el arte culinario. Se puede ver sencillo pero basta un descuido y todo se echa a perder, supiste sortear los inconvenientes gracias a la asesoría de tu esposa.
Felicitaciones por la nominación en este desafío..!
Fue una magnífica experiencia que me motiva a seguir incursionando en estas actividades. Gracias por sus palabras, amigo. Saludos.