Poesia de mayo, amores delectantes...
Poemas frente a ti
¡Cómo dices que debiste conocerme antes…!
Cómo puede ser que tempore anterior, sea tiempo antes de lo vivido.
Que lo pasado tenga otro pasado no realizado
¿Pero qué es ese “antes” cuya hechura de formas y símbolo leo,
Pero que su calor apasionado desconoceré siempre.
Por cuyo y cuánto tiempo es ficción o no.
En las cosas que me pasan
En los ríos que vivo
En los vientos que susurran la visión invisible,
De lo que yace enterrado en el terreno baldío de lo inexorable,
Que añeja y que germina con el roto corazón, pero se riega de lo que aprisionan mis pesares.
Tal vez nos hubimos cruzado, pero no solo de nombres distintos,
No solo de cantares ausentes a los de hoy.
Sino principalmente con otros rostros, con las caretas y las personas de alrededor nuestro tan diferentes, que aún hoy no habían de pronunciarse.
Quizá me soñó en otra vida,
pero caigo ya entonces, ya no era yo mismo, sino la idea previa de mí.
Era como el Demiurgo hacedor de lo externo a sí y que algo de sí posee.
Ahora que me tienes, dudas si soy el destino o el error bien redactado...
¿Y si no nos encontramos, sino que nos recordamos?
¿Quieres vivir cantando el sueño del ser aquellos casi algo?
¿Y si Dios no lo escribe, sino que lo borra, porque aquello no debimos entender?
Pero especialmente no ha de suceder como queremos.
Que el sentir no se da, solo porque debe darse…
Sino que este futuro extinto ya adolece de mi corazón junto al tuyo,
Del toque de los cuerpos en frenesí enloquecida.
Sea lo que sea, yacemos aquí,
Fenecemos aquí,
Dejamos el aliento frente al otro, y aquí estamos.
Inexplicablemente extractos de nuestra pasión desbordada.
Con la razón más desfigurada de lo que no fuimos,
Pero con el entorno acerca del preciso momento en que acontece la rectitud del mensaje.
Lo exacto del ejercicio diario.
La rutina que desemboca en la precisa elección del hábito repetido.
Decantar por acotar, no es sino evitar lo vivido.
Irónicamente precisos...
Infaliblemente amantes, con devoción y amor.
Sírvete la fuente del olvido que no ha partido.
Sírveme cual ambrosía festiva el néctar de tus labios carmesí.
¿Es acaso un requisito ser mejor ser humano que los otros para escribir bella prosa?
Relámpagos con truenos y centellas, les digo con la invitación, con lo que especialmente cultivan las artes de las escrituras, de las letras.
Ha de plegarse al compartir su perspectiva sobre esta interrogante, que toca el vínculo entre la ética y la creación literaria...
Con todo ello digo que el encuentro del Pastor del Ser, ese Homo Ludens que vierte junto al jogo bonito de Brasil en el fútbol, el cantar delicado apasionado fogoso de lo que las estrofas líricas dan.
Concluyo para decantar del:
Porque en la poesía, dentro de su métrica y sus acontecimientos que no solo residen en los objetos como factum que acontecen delante mío, sino en la mirada misma de la conciencia conociendo y que proyectamos sobre ellos con la búsqueda de la posesión más dialéctica, más crispada y torrentosa... Son estados de las almas que buscan incansable y vivencialmente, son las formas de sentir y percibir, de percibir que se transforma todo lo que tocamos y alcanzamos de las multiformes posibles y más Se dan en lo cósico, por las personas o las situaciones - en experiencia siempre poética, en la poiesis vital."