Transferencia en la terapia.
Si un paciente presenta rasgos seductores contigo y a ti eso te gusta o te llama la atención, cuidado!! Si caes en esa trampa no es solo antiético y poco profesional, sino que lo que realmente te llama la atención y/o lo que te gusta es su patología. Así como es contigo lo es con cualquiera. No te sientas especial, es su patología!!