Plaza Francisco Narváez. La Hoyada. Caracas.

Ubicada en plena avenida Universidad, justo a la salida de la estación del Metro La Hoyada, la Plaza Francisco Narváez se ha convertido recientemente en un ejemplo de recuperación urbana en la capital venezolana. Este espacio público fue inaugurado en 1983, coincidiendo con la apertura de la estación de metro que lleva el mismo nombre del sector.

_{Obra de Piedra realizada por Francisco Narváez.}

En medio del espacio destaca una obra de piedra, que aunque no cuenta con una placa identificativa, se presume es una escultura del reconocido artista venezolano Francisco Narváez, cuyo apellido da nombre a la plaza.

_{Espacios Recuperados.}

Durante años, la plaza estuvo ocupada por comerciantes informales, conocidos popularmente como buhoneros. La aglomeración de ventas, sumada al alto flujo peatonal, hizo que la zona perdiera atractivo para el paseo y generara una percepción de inseguridad que alejaba tanto a vecinos como a visitantes. Sin embargo, hace poco la Alcaldía de Caracas llevó a cabo un operativo de desalojo y limpieza que transformó por completo el lugar.

_{Acto Cultural para los niños.}

Hoy, la Plaza Narváez luce libre de obstáculos, con amplios espacios para caminar y un entorno mucho más seguro gracias a la presencia constante de efectivos policiales. La primera impresión al llegar es de orden y tranquilidad, algo que contrasta con el bullicio y el desorden de años anteriores.

_{Personas aprovechando los espacios.}

El día de la visita, la plaza ofrecía un ambiente festivo: colchones inflables para los niños, música en vivo y familias paseando sin prisa. Los transeúntes se detenían a observar, conversar y redescubrir este rincón que vuelve a ser un punto de encuentro en el centro de la ciudad.

_{Colchones Inflables para los niños.}

Visitar la Plaza Narváez hoy es redescubrir una Caracas que apuesta por recuperar sus espacios para el disfrute colectivo. Es un sitio ideal para detenerse un momento, respirar y contemplar cómo el rescate urbano puede devolverle vida a rincones olvidados. Sin duda, un destino que vale la pena incluir en cualquier recorrido por el centro histórico de la capital.

_{Imagen desde la Avenida Universidad.}