Concurso SFS Imagen del día Semana 54

  Inmortalizar visualmente un momento especial de nuestro día, nos permite darle vida eterna a la experiencia mágica que vivimos y, si a esa situación le agregamos el arte de la escritura, nos embriagarnos con lo más sublime del recuerdo. Debido a esto, me siento complacida por unirme a esta dinámica de @ashkhan . Sin más preámbulo, comienzo con mi participación.

  En el transcurso de mi vida he tenido la mágica bendición de contar con excelentes maestros. De cada uno he aprendido elementos claves para forjar mi personalidad y, poder desempeñarme de la mejor manera posible en las diversas circunstancias que se presentan ante mí.

  Generalmente, cuando hablamos de maestros, lo asociamos con una persona y, aunque esto está bien, les confieso que entre mis profesores estrellas, nuestra madre naturaleza está incluida, ya que ella sin emitir palabras, pero con acciones magistrales, me ha enseñado a conocer el valor de la vida, al igual que la importancia de ser resiliente.

  Un ejemplo de lo anteriormente mencionado es que, hoy, en horas de medio día, cuando me dirigía a mi trabajo, vi que una planta de flor mapuche de tamaño moderado, estaba en el proceso de mudar sus flores y, al acercarme a ella, noté que algunas habían caído de una manera particular.

  La caída fue tan precisa que, llegué a pensar que alguien las había acomodado así, pero luego reflexioné en que, independientemente de la caída, lo importante en este cuadro es que, cada flor lo hizo a su estilo y, desde mi perspectiva, esto es una enseñanza que podemos aplicar en la vida, porque para poder levantarnos, debemos saber caer.

  Al momento de acercarme más a las flores de mapuche y, observar todos los detalles que le caracterizan, pensé en que ellas hacen un gran contraste con el césped. Ambas destilan elegancia, armonía y mucha firmeza, acotando que, la grama estaba siendo un buen amigo con la flor, porque, a su manera, le aportó vitalidad y, a pesar de que las mapuches ya cumplieron su ciclo, ella fue muy gentil.

  Si analizamos con detenimiento comprenderemos que, la acción que ambos elementos naturales estaban haciendo nos enseña que, bajo ningún concepto debemos ser egoístas y, es un terrible error normalizar esa actitud ponzoñosa, porque la empatía, es lo que nos permitirá ser excelentes personas; reflexión que me impulsó a aplaudir de pie el gesto del césped.

  Si me enfoco en la semiótica del color que los elementos retratados poseen, veré el significado simbólicamente poderoso que hay, porque los tres proyectan esperanza y pureza; concepto que se acopla perfectamente a la acción que tuvieron los elementos naturales, al igual que, la percepción que debo mantener en mí, porque sí es posible transmitir cosas buenas, aunque en el mundo se vislumbre un caos.

  Me encantó tanto la escena entre las flores mapuche y el césped que, no dudé en fotografiarla, porque sentí que es ideal observarla en esos momentos en los que la esperanza se diluye en mí y, sé que esto es algo que no se debe perder, pero tampoco puedo omitir que hay situaciones donde intenta quebrarse y, justo aquí es que este respaldo visual será de gran ayuda para mí.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

^{La fotografía presentada en esta publicación, es de mi autoría y fue tomada con mi teléfono celular Tecno Spark 30c>}