"Una imagen, mil historias - Wk18"
Esta imagen tiene la representación corporea de mi corazón plegada en cada uno de los fotografiados allí, patenta mi presencia en el corazón de cada uno de ellos, pues representan mi vida en Venezuela, mi querido país del cual me despedí el tercer dia del mes de Abril del presente año. Aquí mi primogénita, mi hija mayor, visita a su padre, que es mi esposo, con sus dos hijos y cuatro de mis bisnietos, en ellos están impregnados los más hermosos recuerdos de esposa, madre, abuela y bisabuela.
Mi esposo convino que viniera a visitar a una de mis hijas en este país, tomé un boleto de avión y estoy con mi bordona, nuestra última hija; ella trabajando, ejerciendo su profesión en este país que la recibió, luego de que aprobara la evaluación que valoró su capacidad de ejercer, estamos en el Sur de Chile y ellos allá en Venezuela, en esa visita, en mi humilde casita, el piso, los cuadros en la pared, todo está impregnado de mí, y ellos allá compartiendo con el padre, abuelo y bisabuelo, con besos, abrazos y mucho calor humano.
Mientras mi bordona y yo de manera virtual, unidos a través de una videollamada, los puedo mirar, ellos nos pueden mirar, pero nos separa una inmensa distancia; observo a él, mi esposo con el teléfono en su mano, se está efectuando una llamada, mi primogénita tomando la selfie con sus dos hijos, cada uno con sus esposas, ellas llevando en sus brazos a sus hijitos, mientras los mas grandecitos al lado de su abuelita ¡como los extraño!
Acá se evidencia la mas grande separación de un hogar, debido a la situación país, los enormes problemas sociales, económicos, políticos que han hecho migrar a tantos venezolanos. Los que se quedan sobreviven a las pésimas gestiones gubernamentales, sumidos en el deterioro del poder adquisitivo, producto de una aterradora inflación que hace imposible una vida digna, los profesionales, técnicos y obreros reciben salarios que no les alcanza para adquirir los productos de la cesta básica.
Durante la toma fotográfica dejamos fluir una sonrisa genuina, de alegría por mirarnos, los niños mas pequeños pronto se olvidarán de mí, así que, me tocó llorar, sentir que los extraño, que si no hubiera el problema, porque personas que manejan a su antojo los poderes militares, judiciales, electorales, morales y económicos mantienen el régimen que sólo siguen destruyendo a mi país y mientras tanto seguiremos tomando mas fotos y mirándonos por videollamada.
Seguiremos haciendo historias, invito a los amigos steemians @magavic, @santomorillo, @ibnatafiya, para que participen en esta dinámica.
Saludos cordiales.
Todas las fotografías fueron tomadas con mi teléfono y exclusivas para Steemit.