Emma habló con sus papás acerca de Jaime su ex, y su nuevo amor, Erik, esto ocurría mientras degustaban del almuerzo.

Sus papás se mostraron felices, y le hicieron saber que estaban interesados en conocer a Erik, para cuando Emma así lo desease.

Por otro lado, en la casa de la señora Martha. Erik y su abuela estuvieron hablando sobre las relaciones a distancia.

Desde la casa de los padres de Emma

Eran las 3.00pm cuando aún Emma se encontraba en la casa de sus papás. Recibió un mensaje por parte de uno de sus hermanos...

—Emma, he pedido permiso en mi trabajo, no es algo que deba hacer, pero hace tiempo que no compartimos. Soy tu amargadito ¡Voy en camino!—Era Marcos uno de sus hermanos.

Así que decidió esperar un poco más para ver a uno de sus hermanos, antes de salir de la casa de sus padres y esperar la videollamada de Erik, en su apartamento.

—Hija, ¿A qué se dedica Erik? Me has dicho que es un excelente pintor, pero ¿Cuál es su profesión? !Me gustaría saber más acerca de él!—La señora Luz amablemente le hizo unas preguntas a su hija.

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Para ese momento, estaban en el jardín, platicando todos juntos.

—Erik es dueño de una empresa en España, la heredó por parte de su difunto abuelo Victor. Así que tiene su propio horario, para esta semana debería estar viajando, quiere asegurarse de que todo esté bajo control, además cuenta con excelentes empleados. Y aún cuando Erik ama el mundo del arte, no se permite dejar a un lado su responsabilidad como jefe.—Fue la respuesta de Emma.

—¡Oh, es un heredero! No me esperaba esa información. Entonces es posible que tenga gustos muy sofisticados, que esté rodeado de lujos, y nosotros no es que estemos mal, hablando en cuanto a lo económico, pero no tenemos la comodidad y placeres para atenderlo como lo esperaría una persona con ese estatus social.—Expresó al sentirse sorprendido el señor Luis.

Emma habló con ellos, debía dar a conocer sobre la personalidad de Erik, de su manera de tratarla a ella. Sus papás necesitaban sentirse seguros, de que aún cuando no contaran con un poder adquisitivo que fuese a la par con el del pintor, la relación entre ambas partes sea amena.

Minuto más tarde se escuchó el sonido de la puerta al abrirla...

—¡Emma, hermana! ¿Cómo estás, pichona? Tú la verdad que no piensas crecer más ¿Verdad? Te has quedado definitivamente pasmada (risas).—Marcos había hecho su entrada, saludando a Emma de un modo muy particular.

—¡No Marcos, así me he quedado!—Le respondió en mientras corría hacia él para abrazarlo fuertemente.

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Era la mayor de los hermanos, y la más baja en estatura, lo que hacía que Marcos y Mathias se burlaran constantemente de ella, un juego sano entre ellos, que terminaba entre risas y anécdotas de cuando eran niños.

Desde la casa de la abuela de Erik

La señora Martha, Erik y Victoria habían terminado de almorzar. Aquella joven se había hecho cargo de lavar los trastes, mientras que los otros seguían platicando.

—¡Abuela, dentro de poco tendré mi cita con Emma! Así que por favor no hagas planes para cenar con ustedes. Además ¡No olvides que viajaré a España! Te mantendré al pendiente de cómo va funcionando todo.—Erik se despidió de su abuela, se levantó de la silla y salió de la casa.

Mientras él caminaba hacia su vehículo, escuchó la voz de Victoria llamando a su nombre. Erik se dió vuelta, y espero hasta que ella se acercara.

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—¡Hola Erik! Quería hablar contigo, ¿Caminamos un momento?.—Victoría le hice una propuesta para poder platicar a solas.

En pintor aceptó muy respetuosamente...

—¡Realmente espero no incomodarte, pero debo confesarte algo! Y tal vez te parecerá absurdo, pero así como te has enamorado de Emma, de una forma mágica, inesperada, con solo haberse visto ¡Así también me ha sucedido a mí, contigo! Sé que es muy pronto, pero me atraes, me gustas y no sé cómo disimularlo. Siento pena por la señora Martha, ella confía en mí y lo que menos necesito es que se entere. Lo cierto es que no puedo ocultarlo más de ti, Yo he sido quien te ha enviado los mensajes, y al no tener respuesta decidí hacerle frente a la situación. No te obligo a que me correspondas, pero si en algún momento tu relación no termina bien, me gustaría que me vieras a mí, como una mujer con quien también puedes estar, y no hablo de intimidad si no de vivir un amor bonito.—Las palabras de Victoria era un cuento escalofriante a oídos de Erik.

Y esto no tiene nada que ver con la apariencia de Victoria, porque de hecho es una mujer hermosa. Sino que él, no podía entender cómo alguien que sabe que esa persona que le gusta está en una relación estable y muy enamorado, se atreva a confesarle sus sentimientos ¿Con qué motivo?.

—Pero Victoria ¿Acaso no me expliqué bien? ¡Estoy en una relación, con la mujer que amo! No tengo ojos para nadie más, ni espacio en mi corazón, ¡Yo respeto tus sentimientos, tú respeta mi decisión! No tengo intenciones de hacerle saber esto a mi abuela, ella requiere de tus cuidados, y sé que se divierte mucho contigo. Me temo que estableceré un límite entre tú y yo, ¡Espero que pronto encuentres a alguien que me borre de tu corazón!—Erik fue directo, sincero y sin decir más regresó a su vehículo.

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El pintor y su musa/Parte I
El pintor y su musa/Parte II
El pintor y su musa/Parte III
El pintor y su musa/Parte IV
El pintor y su musa/Parte V
El pintor y su musa/Parte VI
El pintor y su musa/Parte VII
El pintor y su musa/Parte VIII
El pintor y su musa/Parte IX
El pintor y su musa/Parte X
El pintor y su musa/Parte XI
El pintor y su musa/Parte XII
El pintor y su musa/Parte XIII
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El pintor y su musa/Parte XIX