Concurso fotográfico T-2 E-65 “2 elementos verdes en la naturaleza”

  La aventura de observar a la naturaleza a través de nuestro lente, continúa. En esta ocasión, nuestra amiga @evagavilan nos propone fotografiar 2 elementos en tonalidad verde y, aprovechando que es mi color favorito, me animé a decir presente. Sin más preámbulo, comienzo con mi participación.

  El mundo de la naturaleza es tan amplio que, cuando creemos que hemos visto todo de ella, termina sorprendiéndonos con algo nuevo y, justo en momentos así es donde ratifico que, jamás terminaremos de conocerla en toda su inmensidad, por lo que, siempre vamos a tener nuevas experiencias y conocimientos junto a ella.

  Disfrutar del mundo natural, para mí definitivamente es un placer que amo explorar. Sin embargo, las peculiaridades más extrañas de la naturaleza, son las que suelen atraerme más, porque cuando aprecio esas maravillas fuera de lo común, comprendo que lo diferente, es esencia y magia que debemos valorar.

  Para efectos de esta dinámica, decidí seleccionar un elemento verde que en gran medida despierta en mí el gusanito de la curiosidad, ya que, el nopal tiene características físicas muy particulares además de que, los mitos y toda la sabiduría que hay detrás de él, me han convertido en su fiel observadora y aprendiz.

  Durante la búsqueda, tuve la oportunidad de encontrar un nopal que recientemente había expulsado la flor que tiene uno de sus nopalitos y, confieso que esta fue la primera vez que lo veía internamente, ya que las veces que había pasado, siempre tenía su flor o, ya estaba totalmente formado en lo que de manera común le decimos tuna.

  Para mi agradable sorpresa, en la parte interna del nopalito, se aprecia una variante del color verde y, al tocar con cuidado esa área, logré sentir la humedad acotando que, los nopales tienen un alto contenido de agua en su interior. De hecho, algunas personas aseguran que de este elemento natural han extraído el vital líquido cuando están en una situación de supervivencia.

  La formación del pequeño nopalito nos invita a pensar en que, para la naturaleza, no existe nada imposible y, esto lo digo porque, él crece de un mínimo costado del nopal principal y, debido a su grosor, podría parecer que tiene mucho peso. Sin embargo, su crecimiento se da de manera fluida e incluso, correcta, ya que ninguno de los elementos se perjudica.

  Observar estos elementos verdes me llevó a sumergirme en un contexto de reflexión, porque claramente este nopal es el reflejo de que en la unión, está la fuerza y, él a su manera le ha estado dando la oportunidad de formación a los nuevos nopalitos que han nacido en su entorno y, sin ningún estilo de egoísmo, los deja florecer.

  Hoy el nopalito es dependiente de otro elemento de su especie, pero en un futuro, él también estará nutriendo a otro nopal o, la misma flor que destila y, entre todos aportarán el trabajo que les corresponde para el bienestar de nuestro planeta Tierra e incluso, del resto de los seres vivos que habitamos el mismo ecosistema que ellos.

  Como siempre digo, nuestra madre naturaleza es la mejor maestra de vida que vamos a tener por lo que, dedicarnos a observar su mundo verde, también nos impulsará a conocer lo mágico que es la conexión de sus elementos y, si el contraste es verde, la fascinación es mayor, ya que esa tonalidad representa a la esperanza de la vida.

¡Muchas gracias por leer mi publicación!

^{Las imágenes presentadas en esta publicación, son de mi autoría, fueron tomadas con mi teléfono celular Tecno Spark 30c y tienen exclusividad para esta publicación}